Los sobrecostes en la gestión integral de proyectos no aparecen por arte de magia. Surgen cuando los distintos agentes (arquitectos, ingenieros, contratistas y promotores) no coordinan a tiempo sus decisiones y procesos.
Cuando la comunicación se retrasa y los detalles se resuelven directamente en obra, el reloj corre… y obviamente el presupuesto también.
La coordinación anticipada como punto de partida
En arquitectura, una coordinación anticipada no es un lujo, es una vacuna. Permite anticipar conflictos entre disciplinas, afinar soluciones constructivas y reducir al mínimo las improvisaciones. Implementar una coordinación anticipada de la gestión de proyecto de construcción permite anticipar conflictos, optimizar recursos y evitar decisiones de última hora que disparan los costes.
En otras palabras, planificar bien desde el principio mediante una buena es la mejor inversión para garantizar que la obra se mantenga dentro del plazo y del presupuesto previsto.
En Rominio sabemos que un proyecto bien coordinado desde la fase de diseño es sinónimo de obra fluida, sin llamadas de emergencia ni un “esto no encaja”.
¿Qué papel juega la prescripción técnica?

Aquí es donde entra la prescripción técnica: ese momento en el que los sistemas, materiales y detalles se eligen con criterio y conocimiento.
Cuando el/la arquitecto/a cuenta con el apoyo técnico adecuado, desde el fabricante y/o distribuidor, puede decidir con más precisión:
- ¿Qué carpintería encaja mejor?
- ¿Cómo resolver los encuentros?
- ¿Qué herraje garantiza la durabilidad o qué vidrio ofrece seguridad y confort?
Prescribir no es vender, es entender el proyecto, prever sus exigencias y acompañar a quienes lo hacen realidad.
¿Cómo evitar los sobrecostes en obra?
Los sobrecostes en una obra suelen tener una causa común, la toma tardía de decisiones. Y es que los que nos dedicamos a este sector, sabemos que cada modificación de última hora provoca un efecto dominó que impacta directamente en proveedores, instaladores y plazos de ejecución. Por eso, el verdadero control de costes no depende solo del presupuesto, sino de una gestión eficiente del proyecto y de la información.
Desde Rominio, recomendamos coordinar desde el inicio del proyecto a arquitectos, fabricantes y técnicos para anticipar problemas, optimizar recursos y evitar esos ajustes de última hora que tantas veces “no aparecen en los planos”.
Ejemplo práctico: la ventana bien pensada

Una ventana mal definida puede parecer un detalle menor… hasta que llega el momento del pedido. Una medida fuera de tolerancia o la elección de un vidrio incompatible con el perfil puede obligar a rehacer parte del trabajo, generando retrasos, sobrecostes y frustración en la obra.
Cuando la carpintería se define desde las primeras fases del proyecto, el sistema se integra de forma precisa en el diseño arquitectónico. El resultado es un montaje sin imprevistos, ahorro real de tiempo y un mejor control de costes.
Si te interesa profundizar en cómo la elección del vidrio influye en el rendimiento térmico y acústico, te recomendamos leer nuestro artículo “Cada ventana tiene su vidrio”.
La coordinación es también cultura de proyecto

Coordinar un proyecto no consiste solo en intercambiar planos, sino en compartir una misma visión. Cuando todos los agentes que intervienen en un proyecto (promotor, arquitecto, arquitecto técnico, ingenieros, consultores, prescriptores de sistemas, fabricantes, constructora, jefes de obra, subcontratas, dirección facultativa, coordinador de seguridad, control de calidad, usuario final y un largo etcétera) hablan el mismo idioma técnico, los errores disminuyen y las soluciones fluyen con naturalidad.
Por eso, la colaboración arquitecto-industria ya no es una tendencia: es una necesidad para lograr proyectos más eficientes, precisos y coherentes desde el diseño hasta la ejecución.
En Rominio lo vivimos así
En Rominio, trabajamos de manera integrada con todos los gremios posibles, para minimizar las improvisaciones desde el proyecto hasta la ejecución de la obra.
Acompañamos a los estudios de arquitectura en todas las fases, desde el diseño hasta el montaje final, ofreciendo soluciones en aluminio Qsystems y sistemas complementarios.
Nuestra filosofía es clara, el mejor proyecto se logra cuando la gestión integral del proyecto y coordinación comienza antes de empezar, garantizando eficiencia, precisión y resultados de alta calidad en cada proyecto.

Y ni que decir tiene que apostamos por las formaciones tanto impartidas como recibidas.
¿Cuántas veces has tenido que resolver un detalle en obra que podía haberse previsto en proyecto?
Si quieres planificar una Sesión Técnica Rominio sobre tu próximo proyecto, contacta con nuestro equipo técnico.